El flotador de cerveza de raíz, también conocido como "vaca negra" o "vaca marrón", es un postre americano clásico que se disfruta desde hace más de un siglo. Esta delicia se elabora combinando cerveza de raíz y helado de vainilla, creando una bebida dulce y espumosa. Pero, ¿de dónde viene este querido postre?
Los orígenes de la cerveza de raíz se remontan a finales del siglo XIX. En ese momento, la cerveza de raíz era una bebida carbonatada popular que se elaboraba a partir de una mezcla de hierbas, cortezas y raíces. A menudo se servía en fuentes de refrescos, que eran lugares de reunión populares para personas de todas las edades.
Un día, el propietario de una fuente de refrescos llamado Frank J. Wisner tuvo un golpe de inspiración. Estaba experimentando con una nueva forma de servir cerveza de raíz cuando decidió agregar una bola de helado de vainilla encima de un vaso de cerveza de raíz. El resultado fue una delicia cremosa, espumosa y deliciosa que rápidamente se convirtió en un éxito entre sus clientes.
Wisner comenzó a publicitar su nueva creación como una "vaca negra" debido al color oscuro de la cerveza de raíz y el color blanco del helado, que le recordaba a las vacas blancas y negras de su granja familiar. También se utilizó el nombre "vaca marrón", ya que algunas cervezas de raíz eran de color marrón oscuro y algunos helados no eran de un blanco puro.
La cerveza flotante rápidamente se hizo popular y comenzó a extenderse por todo el país. Fue un placer refrescante y satisfactorio que disfrutaron personas de todas las edades. Hoy en día, el refresco de cerveza de raíz sigue siendo un clásico estadounidense querido y se puede encontrar en el menú de restaurantes, heladerías e incluso restaurantes de comida rápida.
En conclusión, el flotador de cerveza de raíz, también conocido como "vaca negra" o "vaca marrón", es un postre americano clásico que se disfruta desde hace más de un siglo. Sus orígenes se remontan a finales del siglo XIX, cuando el propietario de una fuente de refrescos llamado Frank J. Wisner tuvo un golpe de inspiración y añadió una bola de helado de vainilla a un vaso de cerveza de raíz. El resultado fue una delicia cremosa, espumosa y deliciosa que rápidamente se convirtió en un éxito entre sus clientes y ha sido una delicia estadounidense clásica desde entonces.